A mediados de 2022, Tribute Games y Dotemu nos regresaron a la edad dorada del gaming con un beat ‘em up fantástico basado en la serie animada de Las Tortugas Ninja de los ochentas. TMNT Shredder’s Revenge fue un éxito comercial y de crítica que dejó maravillado a todo el mundo. Pero más importante aún, con ganas de más. Ni lento ni perezoso, el estudio responsable de grandes indies como Panzer Paladin y Flinthook se puso a trabajar en Dimension Shellshock, un DLC muy interesante que suma varias novedades a la propuesta original.
Pero antes de hablar del nuevo contenido adicional vamos a hacer un repaso del juego original. TMNT: Shredder’s Revenge es un beat ‘em up que honra a los grandes clásicos, pero en especial a las adaptaciones de 8 y 16 bits de la serie animada. Se trata de un juego hecho con amor y nostalgia, que consiguió que músicos de la talla del gran Mike Patton (Faith No More) y Tee Lopes (Sonic Mania, Streets of Rage 4) se involucren en la propuesta y hasta recreen la legendaria intro de forma gloriosa. Pero además de la fantástica banda sonora, que evoca a la perfección ese espíritu noventoso tan distintivo de la serie, es un juego sólido por donde se lo mire.
De buenas a primeras, tenemos un modo historia con más de 16 niveles conectados por un hermoso mapa aéreo de Nueva York. Todos tienen ítems y cameos ocultos que hacen las veces de misiones secundarias. Además, ofrece la posibilidad de jugar la campaña en modo en cooperativo (local u online) con hasta 5 jugadores más. En este modo conseguimos puntos que nos permiten acceder a nuevas habilidades y mejoras para el personaje que estemos utilizando, hasta alcanzar el límite de progresión en el nivel 10. Los 7 personajes originales (es decir las cuatro tortugas, Splinter, Abril y Casey Jones, que se desbloquean al completar la campaña) tienen ataques regulares, movimientos especiales y atributos que los diferencian, como fuerza, velocidad o rango.
El apartado artístico es exquisito. Para empezar, el diseño de los protagonistas y los enemigos es soberbio y refleja con fidelidad el estilo de la serie animada. Pero el Diablo está en los detalles, en los guiños y en la calidad de los escenarios que contextualizan la obra. Desde el mapa aéreo que remite al primer juego de 8 bits, pasando por las pantallas donde presentan el próximo nivel con la silueta del jefe como sucedía en los arcades de la época, hasta en el uso de las trampas y power ups tradicionales. Si crecieron con las tortugas van a encontrar cientos de referencias que, no sólo son un mimo para los fans, sino que denotan el amor con el que se desarrolló el juego.
Jugarlo con amigos es una fiesta inolvidable que despierta anécdotas enterradas en nuestra memoria de infantes. Desde la primera vez que vimos a Baxter Stockman homenajear el clásico de David Cronenberg, hasta cuando nos enteramos del pasado de Rocoso y Bebop. El desfile de enemigos clásicos sólo es comparable a la cantidad de escenarios de la serie que vamos a ver perfectamente recreados. Disturbios en el Canal 6, con Vernon como rehén, las alcantarillas de Nueva York y el mismísimo Tecnódromo. Parece estar pensado como para ser considerado ‘EL título’ definitivo de Las Tortugas Ninja. Y hasta incluye un modo arcade con vidas limitadas y las reglas de juego de antaño.
Teniendo en cuenta lo mencionado, ¿Qué es lo que podría mejorar a una propuesta tan pulida? No es tarea sencilla, sin duda. Acá es donde entra en escena el nuevo contenido descargable titulado Dimension Shellshock. Es un DLC que suma dos nuevos personajes y un modo de supervivencia, sencillo pero divertidísimo. Pero también incorpora añadidos cosméticos para todos los héroes, en forma de nuevos sets de colores. Esto nos permitirá jugar con la estética de las historietas, de las series modernas o con las tonalidades que utilizaban los juegos de Game Boy. Además, jugando en la nueva modalidad podremos desbloquear más paletas, incluyendo una completamente oscura, al estilo del primer cómic.
En cuanto a los dos protagonistas que añade Dimension Shellshock, uno es el legendario conejo samurai Usagi Yojimbo (que debuta como personaje jugable), y el otro es Karai, la mano derecha de Shredder, que quiere redimir al Foot Clan. Ambos combaten con espadas, pero sus estilos son completamente diferentes y suman una dosis de variedad al ya completo repertorio. Se pueden utilizar en todos los modos de juego y también pueden subirse hasta nivel 10.
Finalmente, el modo supervivencia es mucho más divertido de lo que podemos anticipar. No sólo se trata de una sucesión de niveles que debemos superar sin morir, sino que incluye una pequeña línea argumental alternativa. Básicamente, Shredder está intentando conquistar el multiverso y debemos detenerlo. Es una trama simple, pero que funciona muy bien para lo que la modalidad propone. Entonces, a fin de frustrar sus planes, debemos viajar por diferentes dimensiones junto a los Neutrinos, coleccionando fragmentos de cristales y derrotando a las hordas del clásico enemigo de las tortugas.
En la práctica se trata de arenas estáticas deliciosamente diseñadas que repasan la historia multimedia de la franquicia. Lucharemos a través de las páginas de un cómic, en el Japón feudal y hasta en un universo en 8 bits, con su correspondiente downgrade gráfico. Otro aspecto interesante de este modo, es que podremos recoger power-ups que nos permitirán luchar como Bebop y Rocksteady, entre otros. Dimension Shellshock tiene un sistema de progresión propio e independiente para cada personaje que nos va fortaleciendo para facilitar el avance. Llegar al final no es una tarea fácil y requerirá de varios intentos. Sin embargo, es mejor estar preparados porque nos enfrentaremos a una versión con esteroides de -un por sí poderoso- Súper Shredder. Un modo ideal para jugar acompañados, pero completamente disfrutable también si preferimos hacerlo en solitario.
Tribute Games no dió puntada sin hilo. TMNT: Shredder’s Revenge – Dimension Shellshock logra capturar a la perfección una esquiva esencia que se perdió en 1993. Esa que decenas de otros juegos intentaron recrear sin éxito. El trabajo en conjunto con Dotemu rindió sus frutos, ofreciendo no solo una de las mejores entregas de la saga, sino el videojuego definitivo de Las Tortugas Ninja. Es ideal para animar una jornada entre amigos y un paso obligatorio para todo amante de la obra de Kevin Eastman y Peter Laird. Pero todavía más importante, es un título fantástico y un ejemplo de cómo se hace un buen beat ‘em up, 30 años después de la edad de oro del género.
Sobre Sebastián Cigarreta
Periodista especializado en gaming, amante de los juegos incomprendidos y eterno enamorado de los clásicos noventosos. Tengo debilidad por todos los MegaMan, siempre Vega main y soy eterno caballero de Boletaria.
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