por Mariano Daneri
Con la llegada de Starfield el año pasado, Bethesda trasladaba su fórmula RPG a un nuevo universo, dejando atras los mundos de fantasía y el post-apocalipsis para dar paso a una ciencia ficción muy cercana al Space Opera. El título nos invitaba a descubrir un futuro donde las barreras del espacio se derrumbaban, permitiendonos llegar a miles de planetas, llenos de facciones y artefactos misteriosos. Ahora, bajo la promesa de abandonar lo procedural y regresar a las bases, Shattered Space se presenta como un DLC mucho más contenido que pone un mayor peso en la narrativa, e invita a regresar a una propuesta que en su lanzamiento cosechó adeptos, pero también varias controversias.
Analizar Shattered Space teniendo como contexto la diversa recepción que tuvo Starfield no resulta fácil. Para algunos, este DLC puede ser todo lo que estaban deseando, aunque quizá muchos lo encuentren decepcionante al punto de no lograr redimir a un juego que no alcanzó a cumplir con sus expectativas. En el caso de quien escribe, me encontré con una experiencia un tanto agridulce. Es decir, está muy bien en lo que ofrece, pero queda un poco lejos de estar a la altura de lo que esperaba. Para bien o para mal, la expansión añade más de lo mismo, aunque sin llegar a mitigar los problemas del juego base.
Shattered Space ofrece una sólida experiencia narrativa centrada en el planeta Va’ruun’kai, hogar de la Casa Va’ruun. Nuestra aventura comienza luego de responder a una llamada de auxilio que lo lleva al sistema Kavnyk, y más precisamente a la ciudad de Dazra. Poco despues nos vamos a ver envueltos en una historia que nos invita a investigar a un misterioso culto que adora a una extraña deidad. La totalidad de la trama transcurre en dicha locación con una misión principal que oscila entre las cuatro o cinco horas de duración, aunque descubrir todo lo que el DLC tiene para ofrecer, puede tomar alrededor de unas veinticinco. Especialmente si dedicamos tiempo a explorar y hacer misiones secundarias. Como resultado, tenemos una experiencia contenida pero sólida, que nos brinda un amplio margen para perdernos en este nuevo escenario.
La nueva locación destaca por sus vistas únicas y recompensa la exploración, con ruinas, bases y templos que ocultan tesoros y secretos. Este DLC hace un particular esfuerzo por hacernos descubrir por nuestra cuenta los misterios que oculta Va’ruun’kai. También nos obliga a prestar atención a las indicaciones que nos dan los personajes durante las misiones y encontrar las cosas por nuestra cuenta en lugar de seguir un marcador. Gracias a este pequeño y sutil cambio, descubrir este nuevo planeta se siente por demás gratificante.
El hecho de prescindir de la exploración espacial y que todo gire en torno a un único planeta es uno de los grandes aciertos de Shattered Space. Esto no sólo permite un desarrollo narrativo más profundo, sino también el de un mundo diseñado hasta el más minimo detalle. Sin embargo, los niveles exteriores parecen poco inspirados, sobre todo por la falta de variedad. También suele suceder que conducir el REV-8 en este entorno devastado no siempre es divertido. Hay muchísimas rocas y árboles indestructibles que complican demasiado la navegación.
En cuanto a las misiones, estas mantienen la marca de Bethesda y siguen la tónica de Starfield, para bien o para mal, con sus puntos altos y bajos. No obstante, cabe destacar el riesgo que sus responsables decidieron tomar en determinados momentos a la hora de ofrecernos distintas resoluciones a los conflictos que se nos plantean. Sin entrar en detalles para no spoilear la experiencia de nadie, basta decir que en algunos casos podremos resolver ciertas situaciones de varias formas. Algunas de ellas poco intuitivas pero si muy inventivas.
Es por dicho motivo que es importante encarar Shattered Space cambiando la mentalidad un tanto binaria respecto a la toma de decisiones a la cual nos tenía acostumbrados Starfield. Ahora hace falta pensar por fuera de las opciones de diálogo a la hora de tomar ciertas decisiones. Sin lugar a dudas, es un punto interesante con el cual sus responsables podrían seguir experimentando a futuro. Un cambio que sentaría sumamente bien a una fórmula que evidencia signos de desgaste.
Los puntos negativos de Shattered Space se encuentran mas en sus ausencias que en lo que tiene para ofrecer. Por un lado, es un DLC mayoritariamente narrativo, cuyo contenido está centrado en Va’ruun’kai y el misterio que le rodea. Dicho de otro modo, no ofrece ninguna novedad ni expande la propuesta en otros aspectos. No hay nuevas naves, no hay nada nuevo en lo que a la construcción de bases respecta, ni tampoco algo interesante que hacer hacer mientras viajamos en el espacio más allá de lo que ofrece el juego base. Todas las novedades están contenidas en un solo lugar.
Por otro lado, sigue siendo Starfield y Shattered Space no propone ningún cambio sustancial nada de lo que ya hacía en su momento. Las secuencias de acción y el combate permanecen inalterados. De hecho, las nuevas armas y enemigos aportan muy poco como para marcar un factor diferenciador en este sentido. Definitivamente, lo mejor del DLC se encuentra en su atmósfera, mucho más oscura y opresiva, al punto de rozar el horror cósmico. Saliendo de ello, poco más queda por destacar.
Al final, Shattered Space es simplemente más Starfield. Si eso es suficiente, bueno o malo, depende de cada uno, claro está. Quienes disfrutaron del juego base en su momento, encontrarán aquí un buen motivo para regresar, pese a las pocas novedades. Explorar Va’ruun’kai se siente bien y nos recompensa con una historia narrativamente sólida y misiones que nos hacen pensar ‘fuera de la caja’. Si bien el nuevo plantea y su diseño es más que bienvenido, la experiencia en su conjunto necesita de algo más sustancial para alcanzar su máximo potencial.
Sobre Mariano Daneri
Me gustan las milanesas con fideos.
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