En su lanzamiento, Wartales nos dejó muy buenas impresiones gracias a una propuesta que nos permitía comandar a un grupo de mercenarios e inmiscuirnos en numerosas aventuras a lo largo y ancho del continente de Edoran. Si bien el título era increíblemente sólido, Shiro Games lo enriqueció notablemente con numerosas actualizaciones, tanto gratuitas como de pago, que añadieron nuevas mecánicas a un videojuego que nos permitía hacer prácticamente de todo. Pero siempre hay lugar para más, y The Skelmar Invasion es la prueba fehaciente de ello. Este nuevo DLC incorpora varias novedades, aunque su apuesta se siente un poco más segura que, por ejemplo, Pirates of Belerion. Aún así, ofrece un buen puñado de excusas como para seguir disfrutando de uno de los mejores juegos de 2023.
The Skelmar Invasion nos lleva a la región de Ormance la cual está dividida y saqueada por los invasores Skelmars. Esta nueva zona se suma al mapa de juego original, expandiendo los límites del mismo y permitiéndonos visitarla según nuestros deseos. De todos modos, pese a que podemos acceder a la región cuando queramos, vamos a tener una mejor experiencia si lo hacemos con un grupo de mercenarios numeroso y experimentado. Lo interesante de este DLC es la forma en que presenta su campaña, estructurada de una forma muy particular, ofreciendo una nueva experiencia dentro del universo Wartales gracias a diferentes opciones para expandir nuestro grupo.
La forma en que Shiro Games decidió estructurar este nuevo escenario, resulta particularmente llamativa. Es decir, se siente como una apuesta sobre seguro que no experimenta mucho con nuevos sistemas y escenarios como lo hicieron con Pirates of Belerion. No obstante, esto no quiere decir que la experiencia no tenga sus condimentos como para convertirlo en un contenido bastante picante. Por un lado, se añaden facciones con las que podemos aliarnos para repeler a los invasores, mientras que por el otro, profundiza el combate con misiones de infiltración y asedios a fortalezas.
Ormance está dividida y tomada por los invasores Skelmars por lo que nuestro objetivo consistirá en unificar el territorio nuevamente. Para ello vamos a tener que tomar puntos estratégicos y hacer aliados que nos faciliten la tarea de reconquistar esta tierra saqueada. En virtud de ello, el escenario se siente mucho más como una campaña militar y no como una serie de misiones sueltas. Y es justamente en este aspecto donde se encuentra el gran valor de este DLC. Y es que Shiro Games juega mucho más con elementos de estrategia, tanto desde una perspectiva militar como diplomática.
En este sentido, The Skelmar Invasion ofrece un conjunto de misiones articuladas alrededor de esta campaña de reconquista, que implican asedios complejos y masivos, además de misiones en las que debemos movernos detrás de las líneas enemigas. Estas últimas destacan por el hecho de que los enemigos cuentan con un cono de visión al mejor estilo Commandos, y en que sólo podemos enviar a un reducido grupo de mercenarios. Por lo general, también cuentan con objetivos sencillos, como liberar a un grupo de prisioneros y eliminar a sus captores antes de que puedan dar la voz de alerta.
Por su parte, durante los asedios nos vamos a medir con numerosos grupos de enemigos en batallas divididas en varias etapas. Cada encuentro presenta diferentes objetivos que debemos cumplir para poder conquistar el terreno. Indudablemente, esto aporta mucha variedad al combate, invitándonos a conformar un equipo equilibrado dado que los encuentros son notablemente más duros. Además, cabe destacar que debemos completarlos del tirón. Es decir, no podemos reparar armaduras ni curar a las tropas entre los sucesivos enfrentamientos.
Otro aspecto que hace de este DLC uno más complejo, es una fina capa de gestión de recursos necesarios para reconstruir y defender Ormance. Con los materiales de construcción podemos construir edificios que proporcionan bonificaciones, mientras que la mano de obra militar sirve para usar habilidades especiales en combate. Finalmente tenemos las raciones que se usan para alimentar a todo el mundo. La adición de este sistema no se siente tan interesante como tener nuestro propio barco pirata. De hecho, me atrevería a decir que dado el planteo de la campaña, resulta predecible aunque más que bienvenido.
Finalmente, con la llegada de The Skelmar Invasion, Wartales recibió una actualización gratuita para todos los usuarios que incorpora una nueva clase: El ballestero. Se trata de una unidad que ataca a distancia, que destaca por su habilidad a la hora de trabajar con otros combatientes. Si bien tiene menos rango que el arquero, resulta igual de dañina, ya que puede realizar múltiples ataques en un turno y perforar armaduras con facilidad. Puede que al principio no parezca demasiado útil, pero conforme adquiere nuevas habilidades y equipo, se convierte en una pieza fundamental para el equipo.
The Skelmar Invasion juega a lo seguro con una experiencia que no difiere demasiado a lo que ofrece el propio Wartales, pero que al mismo tiempo ofrece un desafío nuevo en este entorno familiar. Esto es algo que Shiro Games consigue con algunos cambios en el planteo jugable y a la adición de un par de mecánicas novedosas en el sistema de combate. Sin lugar a dudas, un DLC robusto que nos invita a seguir disfrutando de un excelente videojuego que demuestra que todavía tiene mucho para dar.
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Sobre Mariano Daneri
Me gustan las milanesas con fideos.
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