A pesar de haber sido lanzado hace más de dos décadas, Commandos sigue siendo uno de esos juegos que tengo en un pedestal. La fórmula de estrategia y sigilo que planteó Pyro Studios se me hizo fabulosa y consiguió enamorarme del título. Pero parece que no fui el único en caer ante tales encantos. El género se volvió bastante popular y no pasó mucho tiempo hasta que empezaron a aparecer videojuegos ‘inspirados en’. Sin embargo, con el paso del tiempo dichas propuestas comenzaron a mermar, aunque volvieron a su apogeo cuando Mimimi Games lanzó Shadow Tactics. Gracias a este trabajo (el tercero en su carrera), el estudio alemán pasó a convertirse en un referente, demostrando que la tenían más que clara con un excelente Desperados III. Y ahora vuelven a la carga con Shadow Gambit: The Cursed Crew, una nueva IP sólida, robusta y con mucha personalidad.
Shadow Gambit: The Cursed Crew está ambientado en una realidad alternativa, durante la Edad de Oro de la piratería. A diferencia de los anteriores trabajos del estudio, aquí controlamos a una tripulación que no está sujeta a las leyes de la realidad. Básicamente es un grupo de piratas no muertos, cuyo amplio abanico de habilidades mágicas abren el campo a la creatividad, llevando la táctica y el sigilo un pasito más allá. Además, ahora recorremos las aguas del Caribe, visitando diferentes islas que ofrecen múltiples puntos de entrada y misiones. Lugares que, dicho sea de paso, se pueden revisitar para cumplir con objetivos diferentes. Si bien todo esto significa un gran cambio con respecto a los anteriores trabajos de Mimimi, su jugabilidad se mantiene intacta y -sobre todo- muy divertida.
El título nos pone en los pies de Afia Manicato (cuyo apellido, Manicato, ha de pronunciarse con acento italiano mientras se hace el gesto de ‘la pigna’ con la mano), una muchacha aguerrida cuyo pecho está atravesado por una espada. Ella busca recuperar un barco fantasma llamado Red Marley (¿Guiño a Monkey Island quizá?) que se encuentra bajo el poder de la Inquisición, una fuerza implacable que busca purgar el Caribe de seres sobrenaturales. El caso es que la nave en cuestión esconde un enigma que fue dejado por el legendario pirata Mordechai, su antiguo dueño. Decidida a develar este secreto, la protagonista emprenderá un viaje para reunir a los antiguos tripulantes de la embarcación, a quienes deberá revivir mediante el uso de unas misteriosas perlas negras.
Mientras jugaba a esta versión de prueba a la que Mimimi Games me dio acceso, pensaba en lo pulido que están sus mecánicas y en cuánto disfrutaba de este tipo de juegos en mis años de juventud. La diferencia es que acá, todo parece ir con una marcha más rápida. Afia se siente muy ágil, en especial gracias a sus habilidades para apuñalar a los enemigos. Es la introducción perfecta a este mundo donde las reglas cambian por completo. Al final del día, todo se siente familiar, pero a la vez diferente. Como si todo estuviera permitido puesto que ningún personaje se encuentra atado a las leyes de la física.
La demostración me permitió probar a otros 4 piratas de los 8 que estarán disponibles en la versión final. El que más me gustó fue el esquelético chef Toya, un pirata japonés que corre como Naruto. Sus habilidades ninja -que parecen arrancadas de Shadow Tactics- son geniales. Por ejemplo, puede colocar un katashiro sobre los guardias o en el suelo, lo que le permite teletransportarse instantáneamente (y atacar) desde cualquier parte del mapa. También tiene un silbato para distraer a los guardias y eliminarlos cuando se apartan de sus patrullas. Pero sobre todo, y pese a tener un aspecto genérico, tiene mucha personalidad gracias a una excelente actuación de voz y a sus bromas relacionadas a la cocina.
Por otra parte está Teresa, que es la francotiradora de la pandilla, capaz de eliminar a los guardias desde lejos, aunque siempre que tenga una línea de visión despejada. Luego tenemos a la doctora brujo Suleidy que puede conjurar arbustos de cobertura sobre la marcha. Y finalmente, el enérgico Pinkus Von Presswald, el espía del grupo, capaz de poseer guardias de bajo nivel y usarlos para distraer a sus colegas. Algo que me gustó, es que cada vez que se revive a un nuevo pirata, es transportado a una sala de entrenamiento con tres desafíos que nos darán una buena idea de cómo aprovechar sus capacidades.
Y he aquí algo interesante que hace Shadow Gambit: The Cursed Crew en cómo integra los tutoriales o mecánicas como el guardado y cargado rápido al gameplay. Me refiero a que todo tiene un sentido narrativo. Por ejemplo, ni bien son revividos los propios piratas piden ir a las salas de entrenamiento para ‘quitarse el óxido’ propio de la inactividad. Con el sistema de guardar/cargar pasa algo similar puesto que el juego lo integra como un poder que confiere el Red Marley al grupo de ‘capturar o liberar recuerdos’. Me pareció una forma muy original de amalgamar estos conceptos con la jugabilidad.
En cuanto a los niveles están espectacularmente diseñados, con decenas de detalles increíbles. Todos transcurren en islas que si bien a priori parecen pequeñas, resultan ser bastante extensas. Las primeras misiones sirven para introducirnos en este mundo y sus mecánicas. Algo similar a lo que sucede en Desperados III. De hecho, hay sistemas que están de regreso, como la posibilidad de pausar el juego, planificar diferentes acciones con varios personajes y luego hacer que las ejecuten todos al mismo tiempo. La mecánica de combate sigue siendo sólida y versátil, pudiendo resolver diversas situaciones con mucha originalidad.
Cada misión se siente como un rompecabezas. Pero uno con múltiples soluciones, donde la dificultad reside en los personajes que llevemos en el equipo y sus habilidades. Me sentí genial cuando encontré una forma original de combinar las capacidades de mi tripulación. En esos momentos sonreí entre dientes, con cierto atisbo de inteligencia, como si lo que acababa de hacer no tuviera precedentes. Es una sensación riesgo/recompensa genial en plan ‘¡Mirá la que hice, que genio soy!’. Eso habla de un muy buen diseño, donde están contempladas muchas posibilidades y de cómo se pensó en cada aspecto al dedillo.
Las impresiones que me deja Shadow Gambit: The Cursed Crew son muy buenas. El nuevo trabajo de Mimimi Games se perfila como un juego de estrategia y sigilo muy sólido, lo cual no es sorprendente considerando su pedigrí. Hay algunos detalles que quedaron por ver, como por ejemplo 4 piratas y el sistema de progresión con el que se pueden mejorar habilidades. Tampoco puedo decir mucho sobre la historia, porque apenas vi lo que sería la punta del iceberg. Aún así me resultó interesante y quedé con ganas de saber más acerca de Afia y su tripulación de piratas malditos. Estoy seguro de que los fans del género disfrutarán mucho de esta propuesta cuando se lance el 17 de agosto. Y si les interesa lo que les he contado, recuerden que en el próximo Steam Next Fest podrán probar la demo.
Sobre Franco Borgogna
Periodista apasionado por los videojuegos que sueña en mundos pixel-art sin caídas de frames. Streamer a tiempo parcial, fundador de la comunidad “La Orden del Pixel”, amante de la series, las películas y los comics.
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