Devolver Digital sorprende una y otra vez con las desarrolladoras y títulos que acoge bajo su ala, puesto que suelen propuestas que salen de lo común y, aún cuando tocan géneros bastante típicos, presentan giros de tuerca únicos. Es por eso que Gunbrella llamó la atención de tantos jugadores desde su anuncio. Y más aún luego de enseñar su tráiler de lanzamiento, lleno de criaturas de corte lovecraftiano. De más está decir que este fue el anzuelo con el que el título terminó de engancharme. Entonces, teniendo en cuenta no solo las expectativas que me generaron sus avances, sino también la calidad que suelen presentar los videojuegos publicados por la editora, me adentré en el nuevo trabajo de Doinksoft con muchas ganas. Y si bien la experiencia no estuvo exenta de asperezas, quedé muy satisfecho ya que me ofreció lo que esperaba y más
Gunbrella es un videojuego de acción y aventura que nos lleva a un mundo noir-punk, donde tomaremos el papel de un rudo vigilante en busca de venganza. Una premisa algo clásica pero que bien ejecutada resulta genial, tal como sucede en este caso. Entonces, haciendo uso del Gunbrella (una escopeta disfrazada de paraguas) nos abriremos paso a tiros, saltando y planeando por este melancólico universo, llenando de plomo a quienes se interpongan en nuestro camino. Cabe destacar que el título también toca varios temas como el desastre climático, o la avaricia corporativa, entre otros tantos, aunque quizá más sutilmente.
Lo primero que llamó mi atención es la estética pixel art. Me considero un fanático empedernido de este tipo de gráficos, y puedo decir que el juego hace un uso maravilloso del arte, con un aire super retro. La lúgubre paleta de colores se combina muy bien con las locaciones, generando un ambiente oscuro que se mantiene a lo largo de la aventura. Esto se ve plasmado en cada uno de los entornos, que van desde pueblos en ruinas, hasta fortalezas habitadas entre la basura, a los escombros de una chatarrería. Los sprites de personajes no están descuidados en lo más mínimo. Son sencillos pero detallados, y esto se aprecia también en los jefes y las animaciones en general. La banda sonora también es excelente y muy acorde con la estética.
Gunbrella presenta un argumento bastante simple, protagonizada por el típico antihéroe en busca de venganza. No obstante, Doinksoft emplea giros y toques únicos que hacen que su título se separe y distinga de otros relatos similares. Es una historia que si bien transmite un aire triste y desolador, en la mayoría de los casos, los desarrolladores han sabido tratar con seriedad los temas abordados, pero a la vez dotando al juego de toques de comicidad. Y se nota bastante que se han divertido creando el juego. Nada desentona, ningún momento sobrepasa su estadía, y la trama fluye muy satisfactoriamente. Resulta muy entretenida pero, más importante aún, se siente como todo un relato rudo y noir.
Es un juego que tiene todos los condimentos necesarios para construir un relato oscuro: cultos, aberrantes creaciones de pesadilla, una empresa que busca sonsacar todo lo posible del mundo con egoísmo y delirios de grandeza, y una fuerza especial de agentes que también portan gunbrellas. Y por supuesto un protagonista solitario en busca de venganza que desea encontrar al responsable de su miseria, para quién tiene preparada una bala con su nombre. En este trayecto, somos testigo de muchas situaciones interesantes y conoceremos a diferentes personajes con los que podremos establecer amistades o mostrar absoluta y total indiferencia.
Ahora, donde realmente destaca el trabajo de Doinksoft es en su apartado jugable. De hecho, he de admitir que fue lo que más me gustó. Pero ojo: no por desmerecer lo demás, ni mucho menos, sino porque es super divertido. De por sí, el movimiento del personaje es simple: podemos ir de un lado a otro, apuntar con el arma hacia la dirección que deseemos y, eventualmente, trepar por las paredes rebotando en ellas (¡el clásico wall-jump!). Pero lo que en verdad le da el gustito a todo esto, es el Gunbrella. Es un objeto súper versátil que, además de ser un arma de fuego, sirve de escudo o paracaídas, y hasta podemos usarlo para impulsarnos y maniobrar ágilmente entre plataformas y enemigos. La movilidad que proporciona es fantástica y me divirtió un montón.
El Gunbrella es el eje central del juego, pero no solo porque le da nombre al juego. Literalmente, cada mecánica está pensada para sacar el mayor provecho posible de este artilugio. Se puede usar para cubrirnos, arremeter con una embestida, devolver balas o planear. Es como un ‘todo en uno’, ya que se adapta perfectamente para cada situación. Además, posee diferentes variantes de munición, las cuales son limitadas y tienen cada una su función específica. Por ejemplo, están las balas de precisión que llegan más lejos, otras que se peguen a los enemigos y explotan, o unas que son como cierras que rebotan y dañan todo lo que tocan. El único detalle con esto es que, entre mi tendencia a la austeridad y la falta de incentivo a tener que usarlas, su existencia se resume a algo meramente anecdótico.
A todo esto, mencionar que también se puede mejorar la efectividad del arma, aumentando su daño y velocidad de carga. Del mismo modo, nuestro protagonista puede volverse más fuerte con potenciadores de vida. Dichas mejoras se presentan de dos modos: en forma temporal, a través de comida, o permanentes al reunir dos mitades de corazón. Esto es algo que, por lo general, llega como recompensa al cumplir con algunas misiones secundarias.
Si hay algo que pudiera reclamar al trabajo de Doinksoft, eso serían los jefes. Su diseño es muy bueno, y sus ataques visualmente impactantes. No obstante, se sienten como cualquier otro enemigo. Es como si les faltara algo para que esas batallas se sientan realmente interesantes. Ese condimento especial que las convierta en algo más que un enfrentamiento donde todo se resume a esquivar, cubrirse y disparar. Tal es así que no hay mucha diferencia con luchar contra cualquier otra criatura, salvo una barra de vida.
Por otro lado, también sufrí algunos bugs, que si bien al momento de escribir el análisis han sido corregidos, no puedo evitar mencionarlos. La verdad es que estuvieron a punto de cortar mi aventura de golpe. Y de más está decir que ello me podría haber dejado un sabor amargo al final del día. Pero al margen de estas cuestiones, Gunbrella es un juego que me gustó mucho. Después de todo, ¿Quién no ha tomado un paraguas para blandirlo como una espada o simular que era un rifle? ¿sólo yo? No lo creo.
Gunbrella es un interesante exponente dentro del side-scroller que ofrece una jugabilidad pulida y un sistema de control preciso que me mantuvo absorto en la partida. Un título cuyo relato toca varios temas y situaciones que me hicieron sentir desesperanzado, alegre, decaído y enfadado. Esto último tanto por la historia en sí (especialmente por una escena en concreto), pero también por algunos bugs que encontré en mi aventura. A pesar de ello, mi experiencia fue sumamente grata. La temática noir-punk, sumado a una áspera atmósfera, convierten al trabajo de Doinksoft en uno al que recomiendo, tanto a fanáticos de las historias «hard-boiled«, como para quienes gusten de una propuesta ligera dentro del género que brinda mucha diversión gracias a sus ideas y creatividad.
Sobre David Cedres
Fanático del anime, la ciencia ficción y por supuesto los videojuegos, de preferencia indies.
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