Cuando la ternura, la fragilidad y la delicadeza trascienden más allá de la belleza de una flor, el resultado es algo llamado Ender Magnolia: Bloom in the Mist. El título, desarrollado por Adglobe y Live Wire, nos traen la secuela del muy amado Ender Lillies: Quietus of the Knights, un juego que desde su etapa de acceso anticipado me había dejado muy buenas impresiones. Ahora, que finalmente llegó la actualización 1.0, pude disfrutar de una propuesta que pretende meternos de lleno en la historia de Lilac, pero, ¿Supera logra superar esta los encantos propios de la Doncella Blanca?
Ender Magnolia: Bloom in the Mist, nos cuenta la historia de Lilac, una afinadora que despierta sin recuerdos en un laboratorio. Indudablemente, un claro paralelismo con la situación de Lily que comienza sus andanzas pero en una iglesia en ruinas. La protagonista de esta secuela posee la habilidad de purificar las almas de los atormentados, por lo que su objetivo -a grandes rasgos- consiste en recorrer el peligroso reino de Humelia, liberando a cuantos homúnculos poseídos encuentre. Extrañas volutas de humo transforman a las personas en mutantes, por lo que tocará erradicar esta fuente de maldad de una vez por todas, e intentar salvar a todas las personas que podamos. Si bien la misión no es para nada fácil, por el camino vamos a conocer a varios aliados y ancestros que nos ayudarán a limpiar y depurar el reino.
Al igual que en su predecesor, aquí Adglobe y Live Wire vuelven a apelar varios recursos conocidos para contar la historia del juego. Por un lado, hacen uso de la narrativa fragmentada al más puro estilo soulslike. A través de cinemáticas, descripciones, y diálogos podemos reunir las piezas necesarias para comprender qué es lo que sucede. De todos modos, no es una tarea tan fácil, pues tendremos que rebuscar por todos los rincones de Humelia a fin de conformar este rompecabezas narrativo. Cabe destacar que la premisa es bastante sencilla y no toma demasiado tiempo el poder comprender el conflicto. Lo interesantes como aquellos elementos como la traición, la conspiración y la venganza entre sus personajes principales enriquecen la trama. Todo eso, además del morbo que supone identificar la conexión, referencias, pistas y detalles entre la primera parte y esta secuela.
Es una lastima que los personajes, muy bien construidos y trabajados, no cuenten con voces. Puede que parezca un detalle menor pero, desde mi perspectiva, les quita algo de profundidad y personalidad. Eso sí, cabe destacar que esta segunda parte cuenta con mucho más diálogos ya que podemos interactuar con varios de los habitantes de Humelia. Recordemos que Finisterra estaba poblada solamente por enemigos y jefes, por lo que entablar una conversación era imposible. Por lo tanto, algo tan sencillo como hablar, aporta una notable inmersión al juego, permitiéndonos sumergirnos en las profundidades de este mundo. En resumidas cuentas, la historia aunque lenta al principio, cuando alcanza su punto álgido resulta sumamente disfrutable y atrapante.
En lo que a jugabilidad respecta, las mecánicas de Ender Magnolia: Bloom in the Mist son divertidas y notoriamente pulidas en comparación con la precuela. Además, si bien algunas deficiencias de Ender Lilies pueden entenderse, como por ejemplo cuando Lily se lanzaba al suelo de un modo poco acrobático, están justificadas narrativamente dado que la Doncella Blanca no era una guerrera. Por otra parte, el juego incorpora una variedad de habilidades relacionadas a los homúnculos que Lilac purifica, obteniendo a cambio sus poderes. Esto recuerda al sistema que supimos ver en el título anterior, aunque paralelamente se siente diferente.
El sistema de combate es variado gracias a que disponemos de diferentes homúnculos que facilitan distintos estilos de pelea. Podemos enfrentar a nuestros enemigos en luchas cuerpo a cuerpo, desde la seguridad de la distancia, o apelar a estrategias de defensa. Además, todo esto se enriquece con la añadidura de reliquias, corazas y brazaletes que proporcionan un amplio y variado desarrollo de atributos que fortalecen a Lilac. Gracias a ello podemos armar diferentes builds para ajustar nuestro estilo de juego dependiendo de cada situación en concreto. Aún así quiero enfatizar en el hecho de que, pese a que no hay demasiadas novedades en este aspecto, el juego se mantiene tan divertido como desafiante. Mecánicamente funciona bien y eso es lo que importa al final del día.
Un aspecto que he de mencionar es que por momentos es posible que Lilac se sienta un poco lenta y vulnerable. Esto se debe a que los ataque que realizamos no pueden interrumpirse, aunque es algo que se soluciona conforme avanzamos en la aventura y conseguimos objetos que nos permiten mitigar dicho efecto. Si bien muchos de los mejores atributos como provocar más daño, o recuperar vida al atacar, son bastante limitados, podemos encontraremos suficientes ítems para satisfacer nuestras prioridades y gustos. Y da igual si somos jugadores promedio o hardcore que disfrutan de buscar los ítems correctos para conseguir las configuraciones más poderosas en cuanto a beneficios y riesgos, el título sabe satisfacer a todos los públicos.
En cuanto a la dificultad, Ender Magnolia: Bloom in the Mist es un juego desafiante. Los enemigos son tenaces y agresivos, y cuando combinan ataques a distancia y cuerpo a cuerpo la cosa se puede complicar bastante. Además, en esta secuela se incorporan daños elementales como fuego, electricidad y congelación. E independientemente de que mejoremos la barra de vida al máximo, la vulnerabilidad de Lilac en las áreas finales es prácticamente similar a cuando iniciamos la partida. Tan sólo dos ataques bastan para mandarnos al último punto de control, así que es indispensable mantenernos alerta y atentos a los enemigos.
Por su parte, los jefes iniciales no suponen un gran reto. Mediante una buena lectura de patrones, esquivas y de aprovechar cada ventana de ataque, podemos fácilmente salir victoriosos de cualquier contienda. Sin embargo conforme nos sumergimos en las profundidades de Humelia vamos a encontrar algunos que sí nos harán replantear nuestras builds y estrategias. Como gran novedad, sus responsables decidieron incorporar una serie de opciones que nos permiten modificar la dificultad y definirla a nuestro antojo. De este modo, podemos decidir que tan desafiante queremos que sea la experiencia de juego, pudiendo cambiar los parámetros en cualquier momento. Eso sí: Cuando más alta la dificultad, mejores y más recompensas recibimos al derrotar enemigos.
En términos generales, no se siente del mismo modo el defender a Lilac con los homúnculos, que a Lily con sus espíritus guardianes. La protagonista de esta segunda parte se siente como un personaje bastante más maduro, independiente y resistente. Esto es algo que tiene su contraparte, puesto que disminuye la conexión que Adglobe y Live Wire lograron crear con la Doncella Blanca. Por supuesto, es una interpretación meramente subjetiva, pero aun en los diálogos se nota que estamos frente a una protagonista más liberal y autónoma que pierde parte de la fragilidad y ternura de Lily. Dicho de otro modo, Lilac es maravillosamente dulce, solo que Lily lo es mucho más.
El diseño de niveles es confuso, como es normal en este tipo de juegos. El mapa es realmente amplio, con zonas interconectadas y secretas, aunque existen ciertos lugares que pueden volverse una locura debido al sistema de portales teletransportadores que aleatoriamente nos cambian de lugar, al menos la primera vez que las visitamos. Por otro lado se implementó una sistema de señalización con diferentes colores que nos indica qué zonas fueron exploradas y cuales completadas al 100%. También podemos añadir marcadores personales para señalar los lugares de interés. Y por supuesto, como en todo metroidvania el backtracking se vuelve sumamente necesario. Especialmente si deseamos adquirir todas las habilidades y objetos que nos permitan potenciar a nuestra protagonista. El único detalle es que para llegar a ciertos lugares en concreto, vamos a necesitar de los homúnculos correspondientes.
Antes de terminar, me gustaría hacer hincapié en uno de los aspectos que catapultó en popularidad a Ender Lilies: Quietus of the Knights. Estoy hablando, claro está, del maravilloso apartado musical, con melodías que lograron evocar sentimientos como soledad, tristeza, melancolía, peligro y ternura. Temas como North y Harmonious hicieron que uno como jugador conectara ipsofactamente con el juego. En Ender Magnolia: Bloom in the Mist, Mili sigue a cargo de la banda sonora manteniendo el mismo estilo, aportando un conjunto de melodías de muy buena factura que incluye nuevas versiones de canciones que supimos escuchar en la primera parte.
En lo personal considero que si bien la calidad musical se mantiene, no sentí la misma satisfacción a nivel auditivo que en Ender Lilies. Sin embargo, no caben dudas de que el trabajo musical es fabuloso, y artísticamente sobresaliente. Los pianos, cuerdas, violines, sonidos sintéticos y electrónicos son un deleite para el oído. Sobresalen en especial las melodías que se escuchan en la Urbe Central o en la Atalaya de Combate que son simplemente hermosas, con cuerdas y una profundidad de voces que evocan al estilo andino como si sonase un Bandolín Tachirense.
Ender Magnolia: Bloom in the Mist es un metroidvania que mantiene al género en lo más alto, al punto de considerarlo como uno de mis juegos del año. El estilo artístico, la ambientación, atmósfera, profundidad, personajes, mecánicas de juego, dificultad, diseño de enemigos y trasfondo, lo convierten en uno de esos títulos que no se pueden pasar por alto. Todo, desde los enemigos hasta los homúnculos tienen una razón de ser y justifican su papel en la historia. No son malos solo porque se necesitan villanos, sino que están muy bien trabajados, tanto como lo están los héroes. Sin ánimos de ponerme exquisito, considero que Ender Lilies queda apenas un peldaño por encima. Un excelente trabajo por Adglobe y Live Wire que dieron vida a una secuela fantástica que nos deja expectantes de cara a una tercera parte.
Sobre Ulises Corrales
Soy un apasionado de la fantasía oscura medieval y fanático de los soulslike. Cuento historias con voz sensual en cada hoguera en la que paro a descansar.
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