Saga mítica si las hay, Double Dragon supo reinar en los salones de arcade durante los años ‘90 gracias a una jugabilidad simple que consistía en moverse de izquierda a derecha apaleando malhechores. Si bien la franquicia tuvo sus altibajos, siempre se caracterizó por aferrarse fervientemente a las raíces del beat ‘em up. Incluso en Double Dragon Gaiden -la más reciente entrega- donde por primera vez coquetea con el roguelike. Ahora, aún cuando parece seguir la misma fórmula, lo cierto es que el anuncio de Double Dragon Revive me hizo arquear una ceja. No estoy seguro de porqué, pero hay algo que se siente diferente.
A fin de salir de dudas, en mi paso por Gamescom LATAM 2025 aproveché la ocasión para acercarme al stand de Arc System Works y tener un primer contacto con el título. Lo primero que puedo decir es que Double Dragon Revive no está tan mal. Se ve diferente, se juega más o menos igual, pero es mucho más aparatoso y -en cierto punto- ridículo. Algo diferente a lo que la saga nos tiene acostumbrados. La demostración a la que tuve acceso me ofreció alrededor de 30 minutos de juego donde tomando el control de Billy, pude ver dos niveles, pelear contra algunos enemigos icónicos y con un jefe.
Las sensaciones con las que me quedé son mixtas. El trabajo de Yuke’s tiene el nombre, los personajes y es un beat ‘em up. Sin embargo, algo parece haberse perdido por el camino. La jugabilidad sigue por la senda de la saga, pero añade una mayor variedad de movimientos. Ahora, además de lanzar golpes de puño y patadas, los hermanos Lee pueden saltar y rebotar contra las paredes para realizar ataques en picado, deslizarse por encima de algunos objetos, además de hacer volteretas para esquivar. Este movimiento defensivo tiene generosos cuadros de invencibilidad y tiempo de reutilización, por lo que se volvió mi mejor aliado contra los enemigos más duros.
Al repertorio de ataques se suman los Hipergolpes. Esta técnica permite realizar la patada helicóptero patentada por los Lee que puede lanzar a los enemigos por el aire e incluso puede romper la guardia. Además, cuando un enemigo queda aturdido es posible realizar una especie de ‘ejecución’ para dejarlo fuera de combate con estilo. También es posible tomar a los enemigos y eliminarlos haciendo uso del escenario. Una mecánica que en el juego se conoce como gimmicks attacks. De más está decir que a diferencia de antaño, ahora hacen falta mucho más que dos botones, por lo que la jugabilidad se complejiza bastante.
En este sentido, Double Dragon Revive pretende ir más allá. Ahora pareciera que no va a resultar tan fácil decirle a un amigo ‘Tomá el control. Con este botón das puñetazos y con este patadas’. Aquí hace falta dominar el sistema de combate, memorizar la disposición de los botones, saltar, bloquear, esquivar y varias cosas más. Claro está que alguien con algo de experiencia en el mundo del videojuego puede llegar a entender cómo todo funciona intuitivamente, pero un recién llegado al género quizá tenga algunas dificultades.
ahora hacen falta mucho más que dos botones, por lo que la jugabilidad se complejiza bastante
Lo que no me terminó de convencer es el apartado gráfico. Me recordó a Double Dragon: Neon que ya en su día cambió el pixel art por un 3D más estilizado, lleno de luces y brillo. Aún así, se me hizo extraño. Tanto los hermanos Lee y algunos enemigos como el gigantón Abobo, lucen muy diferentes. Parece como si hubieran perdido parte de su personalidad. Además, el juego cuenta con muchas animaciones que cortan el ritmo de juego. Por ejemplo, cada vez que hacía un gimmick attack o una ‘ejecución’ se disparaba una pequeña cinemática. Las primeras dos o tres veces me sacaron una sonrisa, pero conforme pasaban los minutos las encontré algo monótonas y repetitivas.
Finalmente, los enfrentamientos contra los jefes estuvieron entretenidos. En la demo tuve un pequeño encuentro con Abobo y, más adelante, con Roper. Las peleas son interesantes ya que cada jefe tiene sus ataques característicos y particularidades. Por ejemplo, el Abobo puede realizar un ataque de área que afecta a todo el escenario, por lo que debía saltar en el momento justo para evitar recibir daño. En cuanto a Roper, dicho encuentro fue un poco más complicado ya que siempre anda con un bate en la mano lo que le confiere un alcance descomunal para un combatiente cuerpo a cuerpo. Por suerte, me dí cuenta que podía anticipar sus combos esquivando en el momento justo y golpearlo por la espalda.
No dejo de sentir que Double Dragon Revive es una apuesta arriesgada. Los cambios, tanto a nivel jugable como gráfico, le confieren al título un espíritu que se aleja un poco de la fórmula clásica de la saga. A pesar de ello, le doy un voto de confianza porque en los 30 minutos que duró la demostración lo pasé bien. Eso sí, considero que a un beat ‘em up no le hace falta tanta parafernalia y animaciones que interrumpen con frecuencia el ritmo de juego. De hecho, tenemos numerosos ejemplos en la actualidad que así lo demuestran. Por supuesto, esto es tan sólo una apreciación de alguien que rememora con mucha añoranza los clásicos de antaño. Aún así, estoy dispuesto a darle una oportunidad el próximo 23 de octubre cuando el título se ponga a la venta.
Suscríbete a nuestro Newsletter
Sobre Franco Borgogna
Periodista apasionado por los videojuegos que sueña en mundos pixel-art sin caídas de frames. Streamer a tiempo parcial, fundador de la comunidad “La Orden del Pixel”, amante de la series, las películas y los comics.
Artículos más recientes